11.12.07

TODO UN PUEBLO JUNTO A LA REVISTA


PRESENTACIÓN DE “EL QUIM” EN URIBURU

El colegio secundario rural traspasaba sus sombras a la cancha del Club Uriburu, como si fuera una síntesis de todo lo que esta institución de las afueras de la capital pampeana ha logrado en estos últimos años. El colegio (y sus habitantes, los alumnos y docentes) como gestores, como motores, como un actor social activo de la comunidad, rol y función que en estos tiempos de televisores encendidos sin contenido muchos se olvidaron.

Todo el pueblo ese domingo 2 de diciembre se mudó a la cancha, al costado del ojo del agua, donde más atrás, la pampa se volvía honda y se perdía lejos, lejitos...
El sol pegaba duro ese mediodía. Y el calor no daba tregua.
Los bancos de suplentes servían para acurrucarse bajo sus sombras y soñar sentado algún gol que quedó inconcluso dentro nuestro, algún grito que todavía no llegó. Y ese era el partido esperado por muchos de los chicos que van a esa escuela rural a 42 kilómetros de Santa Rosa; era la presentación de la revista a la comunidad y porque no, a los que venían desde la capital provincial. La Pampa, la madre del trigo desde siempre. Y de la soja desde un tiempo.

Era la previa. Chicos con vestimenta de gauchos salían de los camerines. Una guitarra afinaba su voz debajo del cartel que decía “visitantes”. Un pibe arriba del trailer de un camión, que oficiaba de escenario, le pegaba a la batería con ganas. De los arcos de fútbol colgaban los cables, las luces y el plotter del Contalo Vos.

Atrás quedaban los preparativos varios.....llevar las heladeras, cargar las bebidas, preparar el sonido...siempre hay algo para hacer, acomodar, llevar, preguntar, llevar... ¿lo mejor?; Las ganas de los pibes que arrancaron temprano haciendo los choris para todos los presentes y se apropiaron del evento. Desde conducirlo desde arriba del escenario o vender la revista entre esas 250 personas presentes, hasta organizar la cantina de bebidas y comidas.

El colectivo de la Municipalidad de Uriburu que va y que viene y no para de traer gente de las vecinas localidades de Anguil y Lonquimay. Allá al costado están agrupados los artesanos con sus producciones sobre los mismos bancos que los chicos de la escuela, hacedores, motores del Quim utilizan todos los días. Dos guitarras interpretan una zamba que habla de esperanzas. Una madre emocionada saca fotos de su hija bailando y suspira una lágrima que nunca calló y que jamás cayó.

Los niños corrían desprejuiciados divirtiéndose sin maestros. Aprendiendo del campo. El sol va cayendo y los cuerpos se cargan de energía. Boinas sobre pellones de pelo. Infaltable mate en mano. La gente se acerca con el alimento no perecedero en mano, especie de entrada popular y solidaria al evento. La caja se va llenando de a poco y Caritas será quién reciba esta comida.

Las revistas de distintas latitudes de este Contalo, eran ojeadas y despeinadas por el viento cálido pampeano. Tres paisanos tres miran el recital desde arriba de sus caballos, mientras Marcela Eijo le ponía sonido al atardecer.

Las crónicas dirán que hubo espectáculos de danzas, una banda de rock (La Chacra de Agüero), un dúo de guitarras, folcklore, chacarera y más bailes. Que hubo zapateo y zarandeo, y participaron todos los colegios e instituciones de la región.
Después de que se proyecte el video del Contalo Vos, alguien se acercará en un intervalo, y nos comentará que participó en las capacitaciones en La Rioja. Esas cosas pasan. Nos reímos juntos y comprobamos una vez más que la distancia y el tiempo son relativas. Y que el viento de los días sopla y nos amontona como quiere.

La definición de “comunicación comunitaria” es diferente en el interior del país, me sopla alguien al oído. Diferente de acuerdo a donde nos paremos. Y desde donde los y nos miremos. “El Quim, nuestros pueblos tienen mucho por contar”, precisa la bandera de entrada. Lo cuentan ellos. Lo contamos nosotros.

“Quim”, en Araucano, significa saber, conocer. Y es un lugar distinto desde donde alguien se expresa. Desde donde somos. Exactamente en ese momento. Peña. Reunión. Comunidad. Eventos. Muestras. Fiestas. Presentaciones. Palabras muchas. Ganas todas.
El Quim no es una revista. Es un cárdumen de voluntades. Una manada de sentimientos de pertenencia, una llama que se aviva con el viento de las pampas, unas ganas que se apuran, que apremian, que contagian y andan por ahí, rolando por la pampa inmensa.

Comments:
Felicitaciones contalas y contalos! Da gusto leer estas experiencias tan apasionantes. Sigan adelante, el cambio, o mejor, los cambios son posibles para hacer cada día mejor a nuestra Argentina!
Desde Sucre, Bolivia, las y los saluda un viajero que todavía se siente parte de ese equipo de luchadoras/es!
Besos
Dani
 
Publicar un comentario



<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?


      Materiales de Consulta